La identidad es la representación de lo que somos, pero hay varios tipos de identidad. Las dos principales son la pública y la interior. Hablar de identidad pública es referirnos a lo que el mundo cree bajo nuestra propia intención, por nuestra pertinencia social. Pero hablar de la interior es más complicado, muchas veces ni siquiera es posible. No hay nadie en el mundo que nos conozca mejor que nosotros mismos, aunque también podría ser que ni siquiera uno mismo se conoce bien. Y es entonces cuando aparece ese compañero omnisciente llamado sentido.
Ese detalle, el sentido, es peligroso pero también indispensable. Nuestra humanidad exige su falta, nuestra naturaleza animal no comprende su presencia. Blog Parlantes Nocturnos
Leila, una chica de vida poco interesante -ella misma lo acepta- acaba de perder a su madre, así que su soledad se ve incrementada por la falta de actitud que siempre la ha caracterizado. Hablar de ella y sus reacciones, sus anécdotas y pensamientos no es muy inspirador. Hasta que un día, gracias a su interacción en un foro sobre cuestiones morales e intelectuales de la vida, conoce a Adrian, el fundador del foro. Leila se vuelve constante en esta nueva faceta de su vida virtual, hasta que, por algún motivo, Adrian le encomienda una tarea totalmente inusual.
Le habla de Tess, una mujer que sufre su existencia por culpa de un desesperante trastorno. Ese sentimiento general sobre la vida la ha llevado a tomar una decisión. Un suicidio.
Convencida sobre respetar las elecciones de los otros, Leila acepta ayudarla. Necesita ser Tess para cuando ella ya no esté.
Y ante lo totalmente inusual de una acción como esta; aprende a serlo y así cumplir su objetivo.
Es difícil no querer revelar todo sobre este libro, porque la verdad es que ninguna parte sería comprensible sin la ayuda de todo lo demás que lo conforma. Su estructura y narración hacen de este misterio una respuesta de intención concisa a lo que sucedió. Blog Parlantes Nocturnos
Leila es una persona virtual más que una real. Trabaja desde casa, así que nunca sale, y pasa el resto de su tiempo frente a la computadora. Aunque debido a su edad no se puede decir que siempre fue así. Los vicios del internet son algo de la era moderna, así que afortunadamente tiene un trozo de pasado que contarnos. Ella cuenta esta historia desde sus propias palabras, como un escrito complicado sobre todo lo que hay que considerar para explicar cómo se desarrolló el Proyecto Tess, como lo llamaron los que sabían de su existencia.
Como proyecto es algo complicado. Inicialmente porque no se puede aprender a ser otra persona cuando uno ya es alguien diferente.
Tal y como en la historia muchas personas dan su opinión a las diferentes cuestiones lanzadas en el foro, así podemos expresar las opiniones que surgen al saber de este argumento.
A lo largo de los capítulos nos damos cuenta que la realidad sobre la protagonista, a pesar de estar muy bien dividida, resulta confusa. Leila comienza su explicación cuando todo ya ha sucedido, mezclando el presente con el pasado. Dejándonos con una pequeña idea de lo que sucedió después desde el primer capítulo.
Eso es también lo relevante de esta novela, que se las arregla para mantener el más grande momento de la verdad hasta el mismísimo final, aún cuando no sabemos cuál será ese final. Blog Parlantes Nocturnos
El gran problema de la protagonista es lidiar con sus ideas al tiempo que trabaja fingiendo ser otra persona. Labor en la que se centra el misterio y en el que las pistas pequeñas van apareciendo siendo más o menos percibidas pero sin llegar a darnos una idea de qué podrían significar juntas.
Leila no posee ambiciones, nunca lo ha hecho. Lo que nos lleva a pensar en el tipo de persona que es mientras intentamos respondernos si era la persona indicada para realizar el trabajo, o qué persona lo sería.
Rompiendo el pronóstico inicial de este libro, su título es una referencia indispensable en el libro, pero no tiene que ver con la intención del inicio de esta complicada situación. No es en origen un escenario guiado por el amor desde el lado que conocemos.
Ya les decía que es difícil hablar de este libro sin creer que se está contando todo, aunque contarlo todo llevaría muchas más palabras. Casi tantas como las tiene el libro.
Es, digamos, un lío interesante que posee los momentos suficientes para mantenernos leyendo y construye con cada cosa dicha el gran diagrama de tiempos y verdades que significa todo.
Lottie Moggach convierte lo que parecía una historia sencilla en una situación llena de decisiones con las que no hay vuelta atrás. Su respuesta es, de igual forma, tan simple como complicada. Blog Parlantes Nocturnos
El mérito de esta historia es iniciar una reflexión sobre la identidad en tiempos donde la tecnología la arrebata con facilidad, y donde lo que conocemos muchas veces carece de contacto.
Bésame primero resulta la construcción de los momentos reales que hay detrás de una mentira. También podemos reconocerla como la confusión de vivir lo ajeno, cuando ambas vidas ya eran individualmente complicadas.
Leila acepta la invitación a vivir una vida que aparenta ser más interesante que la suya. Luego se da cuenta de lo técnicamente incorrecto de esa premisa.
El momento en que la división da un resultado. Uno poco deseado pero inevitable.
La frase:
“El otro día dijiste algo de que había que «vencer» el trastorno, como si fuera un dragón al que hay que matar o algo parecido, pero no es así como me siento. Es algo que forma parte de mí, está incrustado en mi carácter y tendré que vivir con ello hasta que me muera. No hay escapatoria. Es lo que hay. Una vez leí una cita de una mujer que decía: «No hay ninguna esperanza de que me cure de ser yo». Exactamente así es como me siento.”
Bésame primero, Lottie Moggach. 410 p. Suma de letras, 2014
¡Hasta la próxima!